En los casos de divorcio, la terapia de pareja va dirigida a la mediación entre ambas partes y el asesoramiento. Cuando hay hijos, los procesos de divorcio son más complicados y requieren de un seguimiento más exhaustivo.
Es muy importante que el proceso de separación no sea traumático para los niños. La ayuda psicológica en este punto es muy efectiva y necesaria. Guía a los padres en cada paso, media entre ellos y busca el máximo beneficio para todos.
Debería haber un asesoramiento de este tipo en todos los procesos de divorcio con hijos.
Es muy frecuente también, que la persona que se divorcia siga un tratamiento individual para superar todas las fases de la separación. Es un cambio muy importante en la vida de las personas, que ven, que de la noche a la mañana, todo ha cambiado y deben adaptarse. Es una época de crisis que debes superar, por una parte sientes el duelo por la pérdida y por otra, necesitas volver a encontrarte como persona individual, aprender a vivir solo y disfrutar de tu soledad. Y esto no es fácil. El apoyo terapéutico en los divorcios es un tratamiento normalmente corto y muy efectivo, que ayuda mucho a superar esta etapa y a salir reforzado de ella.