¿Cuándo debo acudir al psicólogo?
El simple hecho de hacerte esta pregunta, ya es un signo de alarma. Probablemente hace tiempo que no estás bien, pero crees que puedes solucionarlo solo/a, sin ayuda. Normalmente eso no es posible y es mucho mejor que vayas a un especialista. En el Teu Espai la primera visita es gratuita, precisamente, para poder contestar todas esas preguntas. Cualquier persona puede requerir en algún momento de su vida una terapia psicológica para aprender una mejor manera de hacer frente a sus dificultades. A veces el bloqueo emocional nos impide llevar a cabo conductas adecuadas, o a veces es simplemente que no hemos aprendido a ponerlas en práctica. La terapia psicológica es un espacio donde avanzar en el autoconocimiento y conseguir un mayor bienestar. El malestar emocional es el mejor termómetro para saber si necesitamos ayuda. La ansiedad, la tristeza o el malestar son sensaciones normales que podemos experimentar, el problema viene cuando es lo que sentimos la mayor parte del tiempo y durante un período de tiempo demasiado largo. La mayoría de personas, cuando acuden a terapia, hace ya muchos años que sienten ese malestar. No deberíamos esperar tanto para acudir al psicólogo, una detección a tiempo del problema, va a reducir el tiempo de terapia y va a obtener mejores resultados.
¿Debo llevar a mi hijo/a al psicólogo?
En casa ya no podéis más y os habéis planteado ir al especialista. El psicólogo os puede ayudar tanto si vuestro hijo/a tiene un trastorno psicológico que explique todo lo que está pasando, como si vuestro hijo/a lo que necesita son unas pautas claras o más afecto o tiene celos…En ambos casos, la intervención de un profesional es necesaria. Los niños manifiestan su malestar emocional de diferente manera que el adulto, por eso debemos estar atentos a las señales o signos de alarma como irritabilidad, problemas de conducta, retraimiento, tristeza o mucho llanto y sobre todo si dejan de hacer cosas que antes hacían. Ellos no saben identificar lo que les pasa y mucho menos expresarlo. La terapia psicológica puede ayudar a encontrar el origen de ese malestar emocional y facilitar el proceso de cambio para ayudarle a dar respuestas más adaptativas a esos problemas. Para ello es imprescindible saber comunicarse bien con el niño, usando su mismo lenguaje, usando el juego, los cuentos y los dibujos.
¿Cómo elijo a un psicólogo?
Muchas veces, nos dejamos aconsejar por algún conocido que ya ha ido. Lo que buscamos, en el fondo, es la confianza, necesitamos confiar en el profesional que nos va a atender. Hay profesiones que necesitan mucha más confianza que otras: el ginecólogo, el psicólogo, el psiquiatra, el dentista…son especialmente susceptibles a esta búsqueda de confianza. Hoy en día, también las valoraciones de otras personas que hacen en internet sobre ese profesional pueden determinar nuestra decisión. Pero si quieres tener referencias más concretas, visita en nuestro blog el artículo sobre «¿Cómo elegir un buen psicólogo?
¿Me volveré loco?
Un alto porcentaje de pacientes que acuden a consulta sienten miedo a volverse locos. La locura sigue mal entendida y mal definida. La enfermedad mental es amplia y abarca multitud de trastornos, la mayoría de ellos muy lejos de lo que cotidianamente se entiende por locura. Las psicosis son los trastornos que más se parecerían a esta concepción de locura y su prevalencia en consultas externas es muy baja. Por lo tanto, la respuesta a esta pregunta en un 90% de los casos es NO.
Quien acude al psicólogo, ¿es porqué está loco?
La respuesta es NO. Todavía hay gente que cree que la psicología es sólo para «locos» y esto nos entristece mucho a los psicólogos. La psicología es una ciencia joven, que ha evolucionado mucho, pero que todavía tiene muchas cosas que enseñar. En otros países, ir al psicólogo es un hecho natural y un porcentaje muy elevado de la población acude a terapia. Un psicólogo te puede ayudar, no solo cuando tienes un trastorno, sino con cualquier problema de tu vida cotidiana. La importancia de una detección temprana de los problemas psicológicos han hecho que, en la infancia, ir al psicólogo sea, como dijo una madre: «como ir al dentista, ahora todos los niños van». Pues eso es una gran noticia, porque la detección temprana de un problema y su tratamiento en la infancia, evitará trastornos más graves en la vida adulta.
Para más información podéis visitar nuestra sección de la web psicólogo santa coloma